DATOS CURIOSOS
Sabías que al nacer, tenemos alrededor de 10.000 papilas gustativas, listas para saborear y ser educadas. Éstas se deterioran y se atrofian por el estilo de alimentación que viene en años posteriores.

Según todos los organismos de salud mundiales, el hecho de que un niño no coma es lo que más preocupa a los padres, por lo que es la causa número uno de consulta en el mundo.

Si tu hijo sabe más de marcas de comidas que plantas o verduras, el tendrá un 70% más posibilidad de sufrir de obesidad en el resto de su vida. (Abstract Universidad de Pensacola).

¿DÓNDE SE ORIGINA EL PROBLEMA?
El desarrollo de las papilas gustativas empieza desde el vientre. Las primeras papilas gustativas aparecen a la octava semana de gestación. En la semana 12, el feto ya es estimulado en sus receptores de gusto, presentes en aromas del líquido amniótico.

Para la semana 14, los impulsos del gusto se envían a varios grupos de neuronas del tronco cerebral. Entre las semanas 26 y 28 el feto interconecta estímulos y reacciones faciales. En la lactancia también se puede pasar sabores a la leche.

¿CÓMO APRENDE UN NIÑO A COMER SANO?
No olvides que el niño aprende e imita hábitos de comportamiento, lo que por supuesto incluye hábitos alimenticios. Lo más común, cuando un niño no come verduras, es cuando sus padres no tienen la costumbre de hacerlo. Los niños aprenden con el ejemplo. La consulta nutricional no hace milagros, el primer paso lo deben dar los padres, no en el niño.

El niño aprende jugando. Recuerda que su forma de aprendizaje es esta, los adultos entendemos que no se juega con la comida, pero no es así.

Estudios hechos por el departamento de Ciencias Nutricionales de la Universidad Estatal de Pensylvania, luego de investigar a varios niños de entre 4 y 6 años concluyó, que cuanto mayor es el involucramiento de los niños en la elaboración de comidas, mayor es el buen hábito de comer saludable.

No hay mejor estímulo del apetito que el hambre, recordemos que comemos por necesidad, el problema es que ahora los niños crecen en una generación de cero necesidades, en donde como padres no queremos que ellos sientan frío o hambre, sin lo cual el organismo no puede desarrollarse adecuadamente.

LO QUE NUNCA SE DEBE HACER.

  • No tener horarios de comida es uno de los factores que más afectan en la buena alimentación de los chicos, si logras establecer tiempos precisos de cada comida, verás resultados sorprendentes.
  • Recuerda que los niños que ingieren mucha agua durante las comidas, tienen menos apetito, es por esto que lo mejor es que ingieran agua antes o después de cada comida.
  • El azúcar suprime la necesidad de hambre, mientras más azúcar le des a tu niño, menos apetito tendrá. Los estudios nutricionales muestran un descenso impresionante en el apetito del niño con cada porción de dulce llevado a su boca.
  • A los niños no les gusta mezclar las comidas, les gusta ingerir los alimentos por separado; recuerda conocer a tu niño, hay cosas que los libros y la ciencia no nos muestran, pero la observación de padres si. A ellos no les gusta que mezclemos todos los sabores, esto debido a que sus papilas gustativas están nuevas y pueden percibir los sabores de mejor manera que un adulto.
  • Nunca obligues a tu hijo a comer algo que no quiere. Hay que evitar convertir el momento de la comida en una batalla. Si esto sucede a menudo, tu niño comenzará a ver la hora de la comida como una tortura
  • No uses el televisor, los juegos u otros mecanismos, como medio de distracción a la hora de comer. Tu niño debe entender que hay un tiempo y un espacio para alimentarse. La hora de la comida es la hora de la comida, no es la hora de ver la televisión. El niño tiene que darse cuenta que está comiendo, disfrutando del momento, saboreando la comida, dándose cuenta si está fría o caliente, del olor, etc.
  • No utilices el alimento como premio o castigo. “Si no te comes todo, no saldrás al parque a jugar” o “Si no ordenas tus juguetes, no hay postre”. Es necesario que tu hijo entienda la comida como un hecho cotidiano y básico y no como una herramienta para disuadir.
  • No le preguntes a tu niño qué quiere comer, no le ofrezcas demasiadas alternativas para que él escoja. Tú eres el adulto responsable por su salud, y quien sabe qué es mejor para su nutrición.
  • No permitas que tu casa se convierta en un restaurante.

¿POR QUÉ MI HIJO NO COME?

La afectación de un niño por padres divorciados, separados, u hogares inestables con peleas continuas, afectan directamente al segundo cerebro del niño, su estómago. También la distancia física por padres que trabajan todo el día es una de las razones principales en el descenso de su apetito.

La crisis emocional por celos a un nuevo hermano es otro tipo de afectación en el apetito del niño. La causa principal para que un niño no coma es porque está enfermo, o con parásitos.

SOLUCIONES EFECTIVAS
Planifica el menú semanal, no improvises. Busca platos que no solo nutran a tu hijo sino también que lo diviertan con su presentación. Para tu hijo es muy importante cómo se ve.

Planta un pequeño huerto con ellos. Está demostrado que los niños están más dispuestos a aceptar las verduras y frutas cuando ellos las plantan.

Involucrarlos en la cocina es sin duda una de las mejore estrategias, y junto con esto recuerda que los psicólogos recomiendan que al menos una de las tres comidas, deben compartirse en familia si son más mucho mejor.

Haz con ellos el juego de las especias, tapas sus ojos y acércales a su nariz varias especias y alimentos, invítale a olerlos, tocarlos, saborearlos, esto desarrollará todos los sentidos de tus niños al máximo.

RECETAS PARA NIÑOS QUE NO COMEN

PRETZELS DE HARINA DE CENTENO, CHOCOLATE AMARGO Y CANELA

pretzels

INGREDIENTES:
• 2 tazas de harina de centeno
• 6 sobres de estevia
• ¼ cucharadita de azúcar
• ½ taza de agua tibia
• 40 gr o dos cucharadas de levadura fresca
• 2 cucharas de mantequilla de coco
• 2 cucharaditas de polvo de hornear
• 1 cucharada de canela en polvo
• 1 cucharadita de esencia de vainilla.
• 3 cucharas de chocolate amargo

PROCEDIMIENTO.

Hacer un cráter con la harina y colocar en el centro la levadura, azúcar y agua, dejar fermentar por 15 minutos, luego añadir la estevia, la mantequilla de coco, previamente suavizada en el microondas. Añadir la esencia de vainilla.

Amasar e incorporar todos los ingredientes. Estirar como plastilina, tiras largas, no demasiado delgadas.

Hacer una curva como la boca de una cara feliz, y cruzar dos veces la masa hacia adentro dando la forma de la foto.

Poner una olla , 1 litro de agua. Añadir 2 cucharas de polvo de hornear y cocinar cada pretzel por 20 a 30 segundos.

Precalentar el horno a 180 grados centígrados, y terminar de cocinar por 20 a 25 minutos. Espolvorear el chocolate amargo y canela en polvo.

HELADO DE COCO Y TAXO.

helado de coco

INGREDIENTES.
Para 4 porciones

• 2 claras de huevo.
• 1 taxo grande
• 4 sobres de estevia.
• 2 cucharadas de ralladura de coco

PROCEDIMIENTO.
Batir las claras a punto de nieve, añadir dos sobres de estevia. Aparte machacar el taxo con sus semillas, añadiendo la esencia de vainilla, incorporar el coco y el taxo a las claras y congelar por 2 horas.

SALCHICHAS CASERAS.

salchichas caseras

INGREDIENTES
• 4 porciones
• ½ pechuga de pollo
• ¼ de cebolla colorada.
• ¼ de cebolla larga
• ¼ de pimiento rojo y verde.
• ½ ajo.
• 1 taza de agua.
• 1 manojo de albahaca fresca
• Sal marina y cúrcuma.

PROCEDIMIENTO
Hacer un refrito con todas las verduras, luego, en un procesador o licuadora, Procesar todo, hasta convertirlo en una pasta.

Colocar la masa dentro de papel film para cocina, y enrollar, hasta que todo este compacto, volver a enrollar con papel aluminio. Luego cocinar en agua, con ajo, cebolla y sal, por 30 minutos. Enfriar y congelar.

Por: Nutri Chef Rubén Mosquera
Director de Nutrichefsitos, Escuela de cocina y nutrición.
Cursos, talleres, conferencias, catering, coaching nutricional, asesorías.
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