Mantener la casa limpia no tiene por qué ser una tarea pesada ni agotadora.

Muchas veces el desorden se acumula porque queremos hacerlo todo en un solo día, y eso nos roba tiempo, energía y hasta el buen ánimo.

La clave está en dividir la limpieza en pequeñas acciones diarias, que, al final de la semana, hacen una gran diferencia.

Aquí te dejamos una guía práctica para que limpies tu hogar poco a poco y disfrutes de un espacio ordenado sin sentirte abrumada ó abrumado:

Lunes: la cocina

  • Lava la refrigeradora por dentro (una repisa o cajón por vez).

  • Revisa los alimentos que ya no sirvan.

  • Limpia la estufa y pasa un paño por las superficies.

Empieza la semana asegurándote de que el corazón de tu casa (la cocina) esté en orden.

Martes: los baños

  • Lava el inodoro y el lavamanos.

  • Desinfecta las llaves y espejos.

  • Reemplaza toallas y repón papel.

Un baño limpio da paz y comodidad a toda la familia.

Miércoles: la sala

  • Aspira o barre el piso.

  • Sacude el polvo de mesas y adornos.

  • Ordena cojines, mantas o juguetes.

 La sala es la carta de presentación de tu hogar, mantenla acogedora.

Jueves: los dormitorios

  • Cambia las sábanas y ventila colchones.

  • Dobla y guarda la ropa limpia.

  • Retira lo que no pertenezca al cuarto.

 Dormir en un espacio fresco y ordenado renueva las fuerzas.

Viernes: el piso en general

  • Barre y trapea toda la casa.

  • Si es posible, pasa un aromatizante ligero.

  • Revisa esquinas y rincones.

 Nada mejor que un piso limpio para cerrar la semana.

Sábado: los detalles

  • Limpia ventanas y persianas.

  • Ordena estantes, cajones o clósets pequeños.

  • Dedica tiempo a un “extra” que hayas pospuesto.

 Un día para los rincones olvidados.

 Domingo: descanso y gratitud

El domingo no es para limpiar, es para disfrutar. Un hogar ordenado te permitirá usar este día para estar en paz, compartir con tu familia o simplemente descansar.

Tip: No intentes hacerlo perfecto. Hazlo constante. Tu casa no necesita brillar como revista, necesita sentirse hogar.

Hoy queremos decirte que:

Así como mantenemos limpio nuestro hogar, también debemos cuidar nuestro corazón. La Biblia nos recuerda:

“Pero hágase todo decentemente y con orden.”
— 1 Corintios 14:40

Un hogar en orden refleja paz y alegría, y nos ayuda a vivir con mayor ligereza cada día. Síguenos como: RadioHcjb2