Los cortes de luz son comunes en Ecuador, y estar preparado puede hacer que estos momentos sean menos complicados. Aquí te dejamos algunos consejos prácticos para manejar estos apagones de manera efectiva.
- Compra un ventilador USB. Durante los días calurosos, un ventilador que se conecte a tu computadora o a un banco de energía puede ser un salvavidas. Así podrás mantenerte fresco incluso sin electricidad.
- Ten velas y linternas a mano. Las velas son una opción clásica, pero asegúrate de tener portavelas seguros y de usarlas con precaución. También, las linternas LED son una excelente alternativa, ya que ofrecen más luz y son más seguras que las velas.
- Cargadores portátiles. Invierte en un cargador portátil para tus dispositivos móviles. Esto te permitirá mantener tu teléfono cargado y así poder estar informado y en contacto con tus seres queridos.
- Preparar alimentos no perecederos. Ten siempre a mano una despensa con alimentos que no necesiten refrigeración, como enlatados, galletas, frutas secas y granos. Así tendrás opciones disponibles sin necesidad de electricidad.
- Usa bolsas de hielo. Llena algunas botellas con agua y congélalas. Durante un corte de luz, puedes usar estas botellas como hielo en la nevera para ayudar a mantener la temperatura y conservar tus alimentos.
- Organiza actividades sin electricidad. Aprovecha el tiempo para disfrutar de juegos de mesa, leer libros o hacer manualidades con los niños. Estos momentos pueden convertirse en oportunidades para fortalecer los lazos familiares.
- Desconecta tus aparatos. Antes de que se produzca un corte, desconecta los dispositivos electrónicos que no estés usando. Esto no solo ayuda a proteger tus equipos, sino que también previene picos de energía cuando se restablece la luz.
- Mantén una radio a pilas. Una radio puede ser una herramienta valiosa para recibir información sobre la situación y la duración del corte. Asegúrate de tener pilas de repuesto.
- Conéctate con tus vecinos. Los cortes de luz son una buena oportunidad para interactuar con tus vecinos. Comparte recursos, organiza actividades o simplemente conversen. La solidaridad puede ayudar a que todos se sientan más cómodos.
Recuerda que estos momentos, aunque inconvenientes, pueden ser una oportunidad para desconectar y disfrutar de actividades en familia. Como dice la Biblia en Salmos 46:1, «Dios es nuestro refugio y fortaleza, nuestro pronto auxilio en las tribulaciones». Mantén la calma y aprovecha el tiempo en comunidad.
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